Donación de sangre. Compartiendo la vida Realmente es una obra ya hecha con anterioridad, la hicimos en conjunto con un grupo de trabajo joven en el que todos estamos adentrándonos en el campo del audiovisual.
Es un material audiovisual educativo sobre la donación de sangre. Trata generalidades sobre la sangre, sobre la donación de sangre, todo esto con explicaciones de profesionales del tema, también se exponen testimonios de personas, esto último muy importante para entender el alcance de una donación de sangre. El material fue lanzado bajo una licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported. Básicamente se permite compartir - copiar, distribuir, ejecutar y comunicar públicamente la obra. Para más detalles sobre los alcances de dicha licencia http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/deed.es
No permitimos los usos comerciales porque pensamos que es algo netamente educativo, y si alguien quiere lucrar por su exhibición, sea la excusa que fuere, se perderán los objetivos propios del proyecto.
Las obras derivadas tampoco son permitidas, esto mas bien no fue muy abarcado, lo planteamos así porque hay muchos entrevistados en el material, inclusive niños en hospitales, y para salvaguardar su imagen y/o integridad apostamos por no permitir obras derivadas, aunque siempre se apela a que al realizar una obra derivada se haga éticamente.
El objetivo de un material audiovisual de este tipo se concreta al ser visualizado; educar, transmitir el conocimiento sobre algo específico a los receptores. Si ponemos trabas, las posibilidades de que el material alcance su objetivo, sumado a la poca difusión de lo educativo, estas posibilidades serían escasas, y la educación es bienvenida y necesaria para el desarrollo de nuestros pueblos.
Un buen cuento adornado con metáforas, eso es, la mayoría de las veces, suficiente para unas sencillas enseñanzas con pintorezcos sucesos.
Una imagen, la que atrapa un instante, es testigo mudo, pero a gritos, de variados sucesos, como expresa uno de los niños, que le gustaría que los demás vean cómo viven ellos... Probablemente estos sucesos se repiten en muchos lugares del mundo, incluso cerca nuestro, en menor o mayor medida, directa o indirectamente no estamos ajenos a ello, y la autora realmente supo compenetrarse con estos niños y dar un testimonio y ejemplo de acción. Las críticas lo mismo llegaron, y sí, es una problemática profunda, pero hay que mostrarla, Tomás necesita ver para creer.
Born into Brothels: Calcutta's Red Light Kids, documental dirigido por
Zana Briski
y Ross Kauffman. Nos muestra más que una fotografía sobre la vida de unos niños, su entorno en una zona roja de la India, y cómo la rueda seguirá girando.
Sí, muy fuerte el título de este post, más con fines comerciales que otra cosa. Siempre es importante tener una visión amplia, y la explosión cultural es más rica cuando se comparte, se crea, se recrea. Podemos decir que estamos viviendo tiempos especiales con respecto a la re-creación, al remix.
El cartel de al lado realmente lo hizo un artista enojado (lo llamaremos ira) porque encontró en una galería de arte under la reproducción, digamos, art pop de uno de sus diseños fotográficos de montaje. Destruyó toda evidencia de la obra derivada, sí, era una obra derivada, inspirada a partir de la obra de ira.
Ira lo que no alcanzó a leer debido al apuro es una pequeña inscripción ''Agradecimientos infinitos a (ira) por ser mi inspiración''. Había sido que el artista under era fanático del artista ira.
¿Se podría hablar de una cultura del plagio? Digamos, es una constante inspiración, la naturaleza es la única original. El siguiente material da una visión sobre todo esto, nos daremos cuenta también de que a través de muchas manifestaciones artísticas estamos viajando en el tiempo una y otra vez.
Me tropecé sin querer con un vídeo en youtube, aunque el título
del mismo ya indicaba una obra derivada, al parecer la emoción de la
reproducción del mismo enfocó todos mis sentidos en él y no hice caso al título. Pensaba
que era una nueva re-edición orquestal oficial, pero no, era la de
un fan. El tema original de por sí es una fuente de placer para mí,
y esto fue como redescubrirlo.
Bajo el nick de
Piotre Queen Remix PiotreQRMX, el usuario alza a su cuenta de tutubo
buenas ''versiones'' apartir de los temas originales.
No sé si
considerar como una nueva versión, pienso yo respeta muy bien al
original, no pierde la esencia, fue una mezcla muy sutil de la
versión original, versiones orquestales, versiones en vivo, para
todo esto hay que conocer sobre lo que se trabaja, saber bien qué se
quiere hacer, y sobre todo, tener pasión por ello. Para mi es como una
nueva obra creativa, pero, ¿Completamente nueva? No como se estila
en la actualidad con los re-lanzamientos musicales de las grandes disqueras, que son ediciones
comprimidas de discos clásicos, sin dinámica musical (ver loudness war),
sino como había expresado, fue como redescubrir el tema, y el vídeo
no se queda atrás. Ahora bien, de nuevo, considerarla ¿Completamente
nueva? No, es una adaptación, digamos, conjunción de versiones del original, una mezcla inclinada a la música docta.
Probablemente lo
siguiente sea algo nuevo, osea, con un objetivo diferente.
La canción sigue siendo la misma Era y es un joven soñador, su nombre lo dejaremos de incógnito,
pero podemos decir que su madre algo de influencia tuvo en la
decisión, ya que es una seguidora ferviente de la vida del homónimo
de su hijo, sólo lo llamaremos Leo Nardo, sí, y su mamá es
seguidora del signore Da Vinci. Leo es un entusiasta de la música y la escritura, durante su
adolescencia a finales de los 80s, fue su época más creativa,
compuso unas cuantas músicas para saxofón, y escribió un puñado
de cuentos, sólo unos cuantos fueron los dignos en conocer estas
obras, los demás no podremos dormir en paz. Leo dejó su vida bohemia y se puso ''serio''. Estudió
administración de empresas, se graduó y trabaja en uno de esos
edificios con muchas oficinas. Ahora, con la variedad de materiales a
un sólo click, Leo conoció muchas obras, cometió algún que otro
pecadillo bajando gigas de discografías de Jazz ilegalmente,
inclusive con delicadeza, buscando sólo los archivos WAV o FLAC, sin
pérdida de calidad. Grande fue su sorpresa al encontrar muchos temas
musicales semejantes a lo que él compuso y, que, tan, pero tan
celosamente él los mantenía en secreto. Incrédulo una y otra vez
los escuchaba, y no lo podía creer, había mucha semejanza. Un sábado de noche se alejó del Jazz, fue a ver unas películas
de cine independiente con sus amigos, otra grata sorpresa; una de
esas películas que vieron, hecha en un país que Leo ni conocía era
¡La representación de uno de sus cuentos! Aunque, después Leo con
la cabeza más fría meditó, sí, había muchas coincidencias, pero
no era la copia exacta. Leo ahora, aparte de su trabajo normal,
investiga hechos paranormales. La historia del arte, cómo no de otra forma, es riquísima,
despampanante, para deleite de todos los gustos. En estos últimos
tiempos ¿Parecen haberse estancado el desarrollo de algunas
disciplinas? Más concretamente en la música ¿Estamos viviendo los
tiempos del reciclaje total? Cualquier éxito en la actualidad parece
copiado de otro contemporáneo con diferente timbre de sintetizador,
o es un remix de algún tema retro poco conocido infravalorado, etc.
No podemos ser tajantes en una respuesta, estamos viendo una
explosión de nuevas tendencias, muchas desechables, pero expresiones
al fin, y ese es uno de los propósitos de una creación ''el
expresarse''. La revolución tecnológica facilita muchas
herramientas de edición para lo que sea, a tal punto de crearse
estándares en muchos casos de programas caseros muy intuitivos. Todo
esto contribuyó mucho al art-pop, al arte popular, la expresión del remix, y muchos otros
subderivados, en fin, ¿Por qué estancar, limitar algo que nos está
costando tanto mantener ''en línea''? Nos referimos a las obras
derivadas, a los remixes, al fin y al cabo, los grandes $eñore$ son
los únicos que no se benefician (sí, un comentario muy
generalizado, pero Ud sabrá darle las otras aristas). Las siguientes líneas son reflexiones, pienso yo se deben
resaltar, en relación a la publicación Las fronteras del remix
Las obras de arte son relaciones
Apreciar una obra, sea cual fuere la
disciplina, adquiere un significado tan profundo con uno, personal, a
tal punto de inspirarnos, puede ser inspirarnos a realizar alguna
acción, a tener un estado de ánimo tal, o a realizar nuestra propia
obra ¿Nuestra propia obra?.
Elegir un objeto y ponerlo
en otro contexto constituye ya un trabajo creativo, y
no importa si la operación es técnicamente compleja o muy simple,
ya que la tarea más profunda se realiza al nivel del
tráfico de significados que se produce en toda una
cadena de significación.
Están en problemas el usuario de
cultura y el transformador amateur que gracias a las tecnologías
digitales y la distribución en red incorporan el remix en su forma
de participar de la cultura cotidianamente.
De esto se desprende la necesidad,
que expresa Lawrence Lessig, de defender el remix para
defender la cultura, que se ve amenazada en su desarrollo
por el excesivo control del copyright. Este termina generando un
monopolio sobre prácticamente toda forma de expresión, pero es
particularmente grave para la nueva cultura popular construida a
partir de Internet y las tecnologías digitales, ya que el
remix se considera una forma de escritura popular, un nuevo
alfabetismo fundamental que se extiende del texto a las
imágenes, sonidos, códigos y todo tipo de artefactos manipulables
digitalmente.
Es tal la cantidad
de navegantes en el océano cibernético que un trabajo puede llegar
a ser visto por tantos y generar todo tipo de comentarios, de los más
diversos, inclusive interpretaciones nuevas, significados varios y
hasta obras derivadas.
Así mismo, los
pequeños entusiastas se ven acorralados al querer compartir sus
remixes, rendidos ante el poderoso sistema en el que reina la ''élite
artística'', buscan la forma de burlar los controles, pero en
informática un bug encontrado, al burlársele, es un bug
solucionado. Ya frustrado, nuestro gran pequeño entusiasta decidió abandonar sus proyectos de
remixes al recibir una atenta nota del servidor de videos donde él
acostumbraba alzar sus ediciones, una de las compañías gigantes del
entretenimiento quería emprender una demanda, antes de seguir
leyendo eliminó el mail, su cuenta de mail, su cuenta en el servidor
de videos, su historial, quemó su modem, dejó de usar el WIFI de su
vecino y desempolvó su vieja consola de videojuegos.
Lo que se pretende preservar
con el uso justo es el beneficio público de poder ver la obra de una
mejor manera o con nuevos sentidos. No debe haber un
daño a la obra original y los posibles perjuicios para el autor
deberían ser insignificantes frente al valor social que genera la
nueva utilización de la obra.
Si bien es fundamental el mayor
respeto por los creadores de obras originales, también es básica la
libertad para crear sin permisos.
Si no permitimos la reutilización
por miedo a las obras derivadas malas o mediocres, tampoco podemos
garantizar la aparición de las buenas, porque limitamos las
constantes recombinaciones que llevan a la construcción de la
cultura.
Crear leyes que contemplen de forma
explícita y amplia el uso justo, no como una doctrina defensiva,
sino como un derecho a la remezcla reconocido legalmente.
Para todos debe
estar una regla tácita y universal, la de el respeto a la obra
original (aunque muchos tilden de cerrados a otros ante algunos
proyectos que pisotean al original y no son del todo ortodoxos ni
para Mr qué me importa lo inmoral) hay que respetar y saber que en un entorno sin fronteras, hay todo tipo de culturas y creencias. Hay remixes que sencillamente
deseamos nunca se hubiesen hecho, justo se metieron con nuestro tema
musical favorito, y allí queda nuestra crítica, nadie puede
censurarnos, y nosotros tampoco a otros, ¿Pero meterse con nuestro
tema favorito!
En un mundo donde la remezcla es un
lenguaje común y una herramienta artística ampliamente utilizada,
no necesitamos simplemente más “excepciones” al derecho de
autor, sino un marco de libertad que se convierta en norma.
Muchos se rascan las vestiduras al
reclamárseles el uso de una obra, cuando por ejemplo ellos
interpretan un cover musical. Se acuerdan del valor del arte, del
compartir, de la educación universal, etc. Pero al ser ellos los
afectados, no, no hay piedad. Ante todas estas situaciones, hay un
mar de dudas, realmente se necesitan leyes transparentes, claras, sin
excepciones.
Leamos
algunas definiciones importantes sobre el tema en cuestión.
El
derecho de autor
es un conjunto de normas jurídicas y principios que regulan los
derechos morales y patrimoniales que la ley concede a los autores
(los derechos de autor),
por el solo hecho de la creación de una obra literaria, artística,
musical, científica o didáctica, esté publicada o inédita. Los
derechos de autor inician en 1710 con el Estatuto de la Reina Ana,
anteriormente no existían los derechos de autor, solamente existía
el dominio público.
By Zscout370 [Public domain], via Wikimedia Commons
Está reconocido como uno de
los derechos humanos fundamentales en la Declaración Universal de
los Derechos Humanos. En el derecho anglosajón se utiliza la noción de copyright
(traducido literalmente como "derecho de copia") que —por
lo general— comprende la parte patrimonial de los derechos de autor
(derechos patrimoniales). Una obra pasa al dominio público cuando los derechos
patrimoniales han expirado. Esto sucede habitualmente trascurrido un
plazo desde la muerte del autor (post mortem auctoris). El
plazo mínimo, a nivel mundial, es de 50 años y está establecido en
el Convenio de Berna. Muchos países han extendido ese plazo
ampliamente. Por ejemplo, en el Derecho europeo, son 70 años desde
la muerte del autor. Una vez pasado ese tiempo, dicha obra entonces
puede ser utilizada en forma libre, respetando los derechos morales.
El contenido
libre o
información
libre es un
concepto que abarca cualquier obra funcional, de arte u otro
contenido creativo que no posee restricciones legales significativas
en relación con el derecho de uso, la redistribución y la creación
de versiones modificadas o derivadas por parte de terceros. Difiere del contenido abierto en que el libre siempre puede ser
modificado, mientras que se puede no tener tal derecho con contenido
que simplemente es abierto y no libre. El contenido libre abarca todas las obras en el dominio público y
aquellas que tienen derecho de autor pero que están sujetas a una
licencia que otorga y protege las libertades mencionadas. Dado que,
por omisión, la ley otorga a los propietarios de derechos un control
total sobre sus creaciones (todos los derechos reservados), es
necesario declarar de forma explícita que una obra es libre,
generalmente por medio de la referencia o inclusión de cláusulas de
licencia que acompañan la obra. Sin embargo, si los derechos de autor han expirado, una obra que
esté en el dominio público puede en ciertos casos dejar nuevamente
de ser libre, y por consecuencia las obras derivadas también dejarán
de serlo, si la ley de derechos cambia. Contenido abierto (en inglés open content, analogía
de open source) es un concepto que acuñó David Wiley
(Universidad de Utah, EE.UU.) en 1998 para describir cualquier
contenido (artículos, dibujos, audios, videos, etc.) publicado bajo
una licencia no restrictiva y bajo un formato que permita
explícitamente su copia, distribución y modificación. El concepto contenido abierto es heredero de la filosofía del
copyleft y de Free Software, que posee como ejemplo su Licencia de
Documentación Libre GNU, bajo la cual se publica esta enciclopedia
(Wikipedia). Si bien en un principio los contenidos abiertos
aportaron un modelo de licencia propio, OpenContent License (OPL,
1998), actualmente la Open Content Organization aconseja el
uso de los modelos de licencia Creative Commons, inspirados en las
GNU GPL. Creative Commons se constituyó en 2002 por algunos
profesores y profesionales norteamericanos y británicos, y fue
liderado por el profesor Lawrence Lessig (Universidad de Stanford,
EE.UU.). En la actualidad los contenidos abiertos se están difundiendo y
utilizando mayoritariamente en el campo de la Educación Superior,
donde es crítica la transferencia de conocimientos con las menores
restricciones. Si los contenidos abiertos se han hecho un lugar
prominente en la cultura académica, se debe a que responden a tres
condiciones importantes para compartir recursos educativos: el
contexto didáctico, la tecnología empleada para dotarlos de
reutilización y la libre disposición de la propiedad intelectual.
Una
licencia de
derechos de autor
es un permiso formal que indica quién
y cómo
se puede utilizar una obra protegida. Una licencia únicamente
puede proporcionarla el propietario de los derechos, el cual es casi
siempre el autor (fotógrafo, pintor o similar).
Muchos
son los debates que se pueden levantar entorno a la propiedad
intelectual, cómo se diferencia una autoría de algo material (la
invención de una máquina), de una inmaterial (la escritura de un
libro), sin embargo en ambos casos se hace uso del intelecto, y, si
tratamos de temas más actuales tenemos a la gran disputa entre las
grandes productoras de cine y los sitios web P2P, algo reciente es el
juicio realizado a los responsables de la página de intercambio de
archivos The Pirate Bay. Un post relacionado a esto
http://chyryry.blogspot.com/2013/02/una-vision-de-pirate-bay.html
Tuvimos
una panorámica de lo que son los derechos de autor, cómo la era
digital obliga a nuevas legislaciones sobre éstos, y a partir de
ello cómo nacen los derechos de libre acceso.
''Las distribuidoras
de cine no están preparadas para el usuario digital''
Título
que reza una publicación, como conclusión en un encuentro de gente
del sector cinematográfico para analizar la identidad digital del
cine.
Llegan
a esta conclusión en base a estudios realizados sobre productoras de
cine que no disponen de plataformas digitales para las distintas
opciones de acceso electrónico que hay actualmente, y por ende las
estructuras necesarias para transacciones electrónicas comerciales
tampoco están desarrolladas, en un momento en el cual la mayor parte
de la población tiene acceso a celulares inteligentes o smartphones.
Una vez realizado
el análisis de 34 distribuidoras de forma individual, datos como que
el 94,11% de las distribuidoras no disponen de web accesible para
smartphones o el 85,3% no disponen de e-commerce en su web en un país
en el que el 66% de la población dispone de smartphones y más de la
mitad de ellos han comprado con sus terminales, nos confirma esta
situación.
En
otro párrafo se cita algo muy cierto e importante para que los
productores y responsables del sector lo tengan en cuenta, cómo
cambiaron los hábitos de consumo en esta era digital.
Fernando
Botella, Javier Sirvent y Jesús García
comentaron como la situación del mercado unido a un «cambio
de hábitos de consumo, obligan al sector a reestructurar su
estrategia digital desarrollando su
identidad digital para interactuar con el
nuevo consumidor, que está conectado constantemente y potenciará a
corto plazo el próximo canal de ventas, el digital
multipantalla».
Citan
aspectos del mercado del audiovisual en España, como ser la
piratería, el elevado precio de entradas al cine, vemos que esto es
común en nuestros países, aquí en Paraguay tenemos la misma
situación.
España, donde la
piratería, el incremento del precio del cine y otros espectáculos
está provocando una severa caída de asistencia a las salas.
Y
cuando se da esa situación, ¿Cómo competir con ella? ¿Qué
medidas tomar? El usuario en el mayor de los casos sencillamente
consume de forma ''ilegal''.
Según José
Antonio de Luna, director de contenidos de Filmin, «se
consume más contenido audiovisual que nunca» por lo que
reconoce que «tenemos que ser capaces de adaptar
nuestros servicios a las necesidades del consumidor» ya
que un usuario que ya tiene el hábito de «consumir en
internet y cuando toma la decisión de consumir un producto y no lo
encuentra de forma legal en la oferta, se rompe la baraja».
Esto
nos lleva de nuevo a la necesidad de establecer leyes que se adecuen
a los cambios actuales,en cuanto a derechos de autor, la era digital
ha revolucionado la manera de hacer y ver muchas cosas. Como se cita
en el último párrafo de inicio del curso crear y compartir en
tiempos digitales
no importa
tanto la letra fija de la ley o que desde 1886 el
Convenio de Berna diga tal o cual cosa, sino la vigencia cultural de
los conceptos, el impacto de estos en las prácticas sociales y el
contexto que debe interpretarlos en la actualidad.