Me tropecé sin querer con un vídeo en youtube, aunque el título del mismo ya indicaba una obra derivada, al parecer la emoción de la reproducción del mismo enfocó todos mis sentidos en él y no hice caso al título. Pensaba que era una nueva re-edición orquestal oficial, pero no, era la de un fan. El tema original de por sí es una fuente de placer para mí, y esto fue como redescubrirlo.
Queen- Bohemian Rhapsody (Orchestral 2011 Mix by PiotreQ)
Bajo el nick de Piotre Queen Remix PiotreQRMX, el usuario alza a su cuenta de tutubo buenas ''versiones'' apartir de los temas originales.
No sé si considerar como una nueva versión, pienso yo respeta muy bien al original, no pierde la esencia, fue una mezcla muy sutil de la versión original, versiones orquestales, versiones en vivo, para todo esto hay que conocer sobre lo que se trabaja, saber bien qué se quiere hacer, y sobre todo, tener pasión por ello.
Para mi es como una nueva obra creativa, pero, ¿Completamente nueva? No como se estila en la actualidad con los re-lanzamientos musicales de las grandes disqueras, que son ediciones comprimidas de discos clásicos, sin dinámica musical (ver loudness war), sino como había expresado, fue como redescubrir el tema, y el vídeo no se queda atrás. Ahora bien, de nuevo, considerarla ¿Completamente nueva? No, es una adaptación, digamos, conjunción de versiones del original, una mezcla inclinada a la música docta.
Probablemente lo siguiente sea algo nuevo, osea, con un objetivo diferente.
La canción sigue siendo la misma
Era y es un joven soñador, su nombre lo dejaremos de incógnito, pero podemos decir que su madre algo de influencia tuvo en la decisión, ya que es una seguidora ferviente de la vida del homónimo de su hijo, sólo lo llamaremos Leo Nardo, sí, y su mamá es seguidora del signore Da Vinci.
Leo es un entusiasta de la música y la escritura, durante su adolescencia a finales de los 80s, fue su época más creativa, compuso unas cuantas músicas para saxofón, y escribió un puñado de cuentos, sólo unos cuantos fueron los dignos en conocer estas obras, los demás no podremos dormir en paz.
Leo dejó su vida bohemia y se puso ''serio''. Estudió administración de empresas, se graduó y trabaja en uno de esos edificios con muchas oficinas. Ahora, con la variedad de materiales a un sólo click, Leo conoció muchas obras, cometió algún que otro pecadillo bajando gigas de discografías de Jazz ilegalmente, inclusive con delicadeza, buscando sólo los archivos WAV o FLAC, sin pérdida de calidad. Grande fue su sorpresa al encontrar muchos temas musicales semejantes a lo que él compuso y, que, tan, pero tan celosamente él los mantenía en secreto. Incrédulo una y otra vez los escuchaba, y no lo podía creer, había mucha semejanza.
Un sábado de noche se alejó del Jazz, fue a ver unas películas de cine independiente con sus amigos, otra grata sorpresa; una de esas películas que vieron, hecha en un país que Leo ni conocía era ¡La representación de uno de sus cuentos! Aunque, después Leo con la cabeza más fría meditó, sí, había muchas coincidencias, pero no era la copia exacta. Leo ahora, aparte de su trabajo normal, investiga hechos paranormales.
La historia del arte, cómo no de otra forma, es riquísima, despampanante, para deleite de todos los gustos. En estos últimos tiempos ¿Parecen haberse estancado el desarrollo de algunas disciplinas? Más concretamente en la música ¿Estamos viviendo los tiempos del reciclaje total? Cualquier éxito en la actualidad parece copiado de otro contemporáneo con diferente timbre de sintetizador, o es un remix de algún tema retro poco conocido infravalorado, etc.
No podemos ser tajantes en una respuesta, estamos viendo una explosión de nuevas tendencias, muchas desechables, pero expresiones al fin, y ese es uno de los propósitos de una creación ''el expresarse''. La revolución tecnológica facilita muchas herramientas de edición para lo que sea, a tal punto de crearse estándares en muchos casos de programas caseros muy intuitivos. Todo esto contribuyó mucho al art-pop, al arte popular, la expresión del remix, y muchos otros subderivados, en fin, ¿Por qué estancar, limitar algo que nos está costando tanto mantener ''en línea''? Nos referimos a las obras derivadas, a los remixes, al fin y al cabo, los grandes $eñore$ son los únicos que no se benefician (sí, un comentario muy generalizado, pero Ud sabrá darle las otras aristas).
Las siguientes líneas son reflexiones, pienso yo se deben resaltar, en relación a la publicación Las fronteras del remix
Las obras de arte son relaciones
Apreciar una obra, sea cual fuere la
disciplina, adquiere un significado tan profundo con uno, personal, a
tal punto de inspirarnos, puede ser inspirarnos a realizar alguna
acción, a tener un estado de ánimo tal, o a realizar nuestra propia
obra ¿Nuestra propia obra?.
Elegir un objeto y ponerlo
en otro contexto constituye ya un trabajo creativo, y
no importa si la operación es técnicamente compleja o muy simple,
ya que la tarea más profunda se realiza al nivel del
tráfico de significados que se produce en toda una
cadena de significación.
Están en problemas el usuario de
cultura y el transformador amateur que gracias a las tecnologías
digitales y la distribución en red incorporan el remix en su forma
de participar de la cultura cotidianamente.
De esto se desprende la necesidad,
que expresa Lawrence Lessig, de defender el remix para
defender la cultura, que se ve amenazada en su desarrollo
por el excesivo control del copyright. Este termina generando un
monopolio sobre prácticamente toda forma de expresión, pero es
particularmente grave para la nueva cultura popular construida a
partir de Internet y las tecnologías digitales, ya que el
remix se considera una forma de escritura popular, un nuevo
alfabetismo fundamental que se extiende del texto a las
imágenes, sonidos, códigos y todo tipo de artefactos manipulables
digitalmente.
Es tal la cantidad
de navegantes en el océano cibernético que un trabajo puede llegar
a ser visto por tantos y generar todo tipo de comentarios, de los más
diversos, inclusive interpretaciones nuevas, significados varios y
hasta obras derivadas.
Así mismo, los
pequeños entusiastas se ven acorralados al querer compartir sus
remixes, rendidos ante el poderoso sistema en el que reina la ''élite
artística'', buscan la forma de burlar los controles, pero en
informática un bug encontrado, al burlársele, es un bug
solucionado. Ya frustrado, nuestro gran pequeño entusiasta decidió abandonar sus proyectos de
remixes al recibir una atenta nota del servidor de videos donde él
acostumbraba alzar sus ediciones, una de las compañías gigantes del
entretenimiento quería emprender una demanda, antes de seguir
leyendo eliminó el mail, su cuenta de mail, su cuenta en el servidor
de videos, su historial, quemó su modem, dejó de usar el WIFI de su
vecino y desempolvó su vieja consola de videojuegos.
Lo que se pretende preservar
con el uso justo es el beneficio público de poder ver la obra de una
mejor manera o con nuevos sentidos. No debe haber un
daño a la obra original y los posibles perjuicios para el autor
deberían ser insignificantes frente al valor social que genera la
nueva utilización de la obra.
Si bien es fundamental el mayor
respeto por los creadores de obras originales, también es básica la
libertad para crear sin permisos.
Si no permitimos la reutilización
por miedo a las obras derivadas malas o mediocres, tampoco podemos
garantizar la aparición de las buenas, porque limitamos las
constantes recombinaciones que llevan a la construcción de la
cultura.
Crear leyes que contemplen de forma
explícita y amplia el uso justo, no como una doctrina defensiva,
sino como un derecho a la remezcla reconocido legalmente.
Para todos debe
estar una regla tácita y universal, la de el respeto a la obra
original (aunque muchos tilden de cerrados a otros ante algunos
proyectos que pisotean al original y no son del todo ortodoxos ni
para Mr qué me importa lo inmoral) hay que respetar y saber que en un entorno sin fronteras, hay todo tipo de culturas y creencias. Hay remixes que sencillamente
deseamos nunca se hubiesen hecho, justo se metieron con nuestro tema
musical favorito, y allí queda nuestra crítica, nadie puede
censurarnos, y nosotros tampoco a otros, ¿Pero meterse con nuestro
tema favorito!
En un mundo donde la remezcla es un
lenguaje común y una herramienta artística ampliamente utilizada,
no necesitamos simplemente más “excepciones” al derecho de
autor, sino un marco de libertad que se convierta en norma.
Muchos se rascan las vestiduras al
reclamárseles el uso de una obra, cuando por ejemplo ellos
interpretan un cover musical. Se acuerdan del valor del arte, del
compartir, de la educación universal, etc. Pero al ser ellos los
afectados, no, no hay piedad. Ante todas estas situaciones, hay un
mar de dudas, realmente se necesitan leyes transparentes, claras, sin
excepciones.
Bibliografía
Es cierto que la reutilización puede provocar cansancio ante la sensación de que siempre se escucha o se ve lo mismo una y otra vez replicado. Es que la industria musical se basa en el reciclaje, sin dudas, al trabajar con pautas sumamente reconocibles para llegar a un público masivo. Pero eso no se debe confundir con la reutilización creativa.
ResponderEliminar¡Muy bueno el cuento de Leo Nardo y sus poderes paranormales!