La orquesta natural también lucha

El hit del verano lo ponen las cigarras

Como citábamos al pie de una de las fotos compartidas - el sonido del verano ponen las cigarras -. Esto forma parte de un paisaje sonoro, característico de una estación del año, así hay lugares, en los bosques por ejemplo, en los que se puede escuchar una gran orquesta compuesta por insectos, animales, el movimiento de las hojas con el viento, el correr del agua, etc. Como también tenemos el ruido característico de la ciudad; bocinazos, máquinas de construcción, tráfico pesado, etc.

La reinante contaminación ambiental, sumada a la explotación indiscriminada de recursos naturales, entre otros factores, tuvieron su incidencia en la disminución y la extición de especies.

Vamos a mirar la problemática desde una perspectiva de estudio diferente, a partir de lo que sonoramente podamos obtener. Estudios realizados por Bernie Krause demostraron que también el paisaje sonoro se ve afectado, inclusive  en áreas en las que visualmente parecían no haberlas sido.

Bernie Krause: la voz del mundo natural

 

Las especies luchan, el sonido de muchas de ellas también tienen un propósito. Eyal Shy de la Wayne State University concluyó que algunas aves por ejemplo aumentaron la intensidad de su canto. Las aves de la ciudad de San Francisco han ido elevando el tono de su canto para ser oídas por encima del cada vez más ensordecedor ruido de tráfico.

Una prueba más de la importancia de los espacios verdes, y la prueba de cómo estamos afectando nuestro ambiente. Hasta el disfrute de los sonidos que la naturaleza nos regala se va tornando un privilegio.